Puntos destacados:
- Líderes de la Iglesia católica en Australia rinden homenaje al papa emérito Benedicto XVI.
- Los feligreses también lamentaron su fallecimiento en los servicios dominicales en todo el país.
- Los sobrevivientes de abuso ocurrido dentro de la Iglesia católica dijeron que no se sentían cómodos llorando su muerte.
Líderes religiosos, figuras políticas y feligreses de toda Australia han rendido homenaje al papa emérito Benedicto XVI, fallecido el sábado a los 95 años.
El arzobispo Anthony Fisher conoció al papa emérito cuando éste viajó a Australia para la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Sídney en 2008. Ambos también se reunieron durante varias audiencias privadas en Roma.
"Era el más gentil de los hombres, descubrí esto en mis varios encuentros con él", dijo Fisher.
El papa Benedicto XVI llega para la misa final de la Jornada Mundial de la Juventud en Sídney el 20 de julio de 2008. Source: AAP / Dean Lewins
El arzobispo describió a Benedicto como un "gran Papa maestro".
"Claramente fue uno de los más grandes pensadores que jamás se haya sentado en la silla de San Pedro, y aportó con esa maravillosa comprensión de la fe católica la capacidad de articularla", aseguró.
Durante una celebración católica de la comunidad vietnamita, en el oeste de Sídney, el sacerdote Joseph Nguyen le dijo a SBS News que la comunidad estaba orando por el papa emérito.
"Ayer escuché que había fallecido. Hoy, cuando dé misa, la comunidad vietnamita rezará por él", señaló.
"Creo que le caía bien a todos los vietnamitas".
"Su legado como Papa fue breve, pero siempre apreciamos lo que ha hecho por (la) comunidad católica de todo el mundo y rezamos por él", dijo un feligrés.
El primer ministro australiano Anthony Albanese dijo que estaba "triste" tras la noticia de la muerte del papa emérito.
"Entristecido al enterarme del fallecimiento del papa emérito Benedicto XVI, esta noche", escribió en Twitter.
"Que descanse en eterna paz."
El diputado de los nacionales Michael McCormack dijo que las visitas de los ex pontífices a Australia serán recordadas con cariño.
Sobrevivientes de abuso sexual dicen no estar de luto
Un grupo que representa a los sobrevivientes de abuso sexual por parte del clero dentro de la Iglesia católica dijo que no pueden ignorar la forma en que el papa emérito Benedicto XVI manejó el escándalo de abuso.
La Red de Sobrevivientes de los Abusados por Sacerdotes (SNAP, siglas en inglés), con sede en los Estados Unidos, pero con presencia en Australia, dijo que no están de luto por su fallecimiento.
“Desde nuestro punto de vista, la muerte del papa Benedicto XVI es un recordatorio de que, al igual que Juan Pablo II, Benedicto estaba más preocupado por el deterioro de la imagen de la Iglesia y el flujo financiero hacia la jerarquía, que por comprender el concepto de disculpas verdaderas seguidas de reparaciones verdaderas para las víctimas de abuso", declaró el grupo en un comunicado.
"Ya es hora de que el Vaticano se vuelva a centrar en el cambio: decir la verdad sobre el clero abusivo conocido, proteger a los niños y adultos y permitir que se les haga justicia a aquellos que han sido heridos.
"Honrar al papa Benedicto XVI ahora no solo está mal, es vergonzoso".
Los escándalos de abuso infantil estuvieron presentes a lo largo de los ocho años de pontificado Benedicto XVI, pero se le atribuye haber impulsado el proceso para disciplinar, o expulsar, a los sacerdotes depredadores, después de una actitud más relajada bajo su predecesor, el papa Juan Pablo II.
Un funeral inédito, el del papa emérito Benedicto XVI
Cuando muere un pontífice, los funerales y su sucesión han sido establecidos por la Constitución Apostólica, aunque esta vez el Vaticano deberá improvisar ya que se trata de la primera vez en la historia que se celebran las exequias de un papa emérito, sin funciones.
Por lo general, la muerte del soberano pontífice desencadena la rápida convocatoria de un cónclave, durante el cual los cardenales de todo el mundo son convocados para elegir a su sucesor.
Ese caso ha sido excluido esta vez, ya que Francisco reina desde 2013 tras haber sido elegido pontífice por la renuncia en 2013 de Benedicto XVI.
El anuncio de la muerte de Joseph Ratzinger el sábado por la mañana, tras una agonía de varios días, no cuenta con un protocolo específico, por lo que se seguirían algunos de los pasos para un pontífice en ejercicio.
Se trata de la primera vez en la historia moderna que un papa preside el funeral de su predecesor.
Según la Constitución Apostólica promulgada en 1996 por Juan Pablo II, un Papa debe ser enterrado entre cuatro a seis días después de su muerte, lo que ha sido respetado.
El funeral será presidido el 5 de enero por Francisco en la plaza de San Pedro, cinco días después de su muerte.
La ceremonia comenzará a las 08:30 (hora local), será inédita además de solemne, tal como anunciado por el Vaticano.
Con ese acto se concluye la saga de los "dos papas", los dos vestidos de blanco, que han convivido durante casi una década en el estado más pequeño del mundo.
El Vaticano también anunció que el cuerpo de Benedicto XVI será expuesto a partir del lunes hasta el miércoles en la basílica de San Pedro, de manera que los fieles de todo el mundo puedan rendirle homenaje.
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