Decenas de miles de inmigrantes indocumentados en Australia corren el riesgo de caer en la indigencia y de no poder acceder a una atención sanitaria adecuada durante la pandemia de coronavirus, según alertan los defensores de derechos humanos.
El Gobierno Federal calculó, en un informe de 2017, que hay más de 64.000 inmigrantes indocumentados en Australia. La mayoría de ellos se encuentran en esta condición porque se han quedado más tiempo de lo previsto en su visado, aunque se desconoce el número exacto.
Los defensores de los inmigrantes señalan que la invisibilidad los hace particularmente más vulnerables al impacto de COVID-19. Sin el derecho legal a estar en Australia, los inmigrantes indocumentados no pueden acceder a las prestaciones sociales si se cancela su trabajo y no tienen derecho a Medicare.
Muchos también temen que se les pregunte sobre su situación de visado si buscan asistencia. sanitaria, lo que hace temer que el virus pueda propagarse sin control.
- Los inmigrantes indocumentados no tienen derecho a prestaciones ni ayuda.
- No acuden a las autoridades ni a los médicos por temor a ser deportados.
- Viven en dormitorios hacinados y trabajan en la recogida de fruta. Un caso entre miles.
Mohamed (nombre cambiado), que llegó a Australia con una visa de turista desde Malasia en 2013, dijo a SBS News que anteriormente ha luchado por acceder a la atención médica debido al asma que padece. Él está preocupado por lo que pasará si contrae COVID-19.
"Hace dos o tres años tuve un ataque de asma muy grave e intenté ir al hospital pero me dijeron que tenía que pagar 400 dólares porque no tenía Medicare", dijo el hombre, al recalcar que si se infecta con COVID-19 la situación será “difícil”.
Durante muchos años después de que se excediera el plazo de su visado, Mohamed, que tiene unos 20 años, trabajó ilegalmente en granjas, a menudo recogiendo fruta por la que se le pagaba tan sólo 1,20 dólares por caja.
"He sido legal, luego ilegal, y luego legal otra vez", precisó, al añadir que vino a Australia porque le dijeron que podría ganar dinero para mantener a su familia.
Mohamed tiene ahora un visado puente mientras se evalúa su solicitud de asilo, pero sigue trabajando ilegalmente en la región de Victoria, donde se le paga por debajo del salario mínimo. Él gana lo justo para pagar el alquiler de su alojamiento, que comparte con otras cuatro personas, y los alimentos.
La abogada de inmigración y fundador del grupo de defensa Solidaridad con los Inmigrantes Indocumentados Sanmati Verma dijo que la historia de Mohamed no es única.
"Cuando la gente piensa en indocumentados como un estatus... piensan en lugares como los EE.UU. o Europa con fronteras terrestres, lo que significa que la gente puede entrar en un lugar u otro sin papeles formales. El sistema de inmigración de Australia funciona de tal manera que puede otorgar el estatus legal y al mismo tiempo tiene varias formas de quitarlo", dijo Verma.
Cifras vagas
En 2017, un comité del Senado supo que había unas 64.600 personas que se habían quedado más tiempo del previsto en su visado en Australia. De ellas, 6.600 habían estado en el país entre 15 y 20 años.
Tanto Verma como la profesora adjunta de la Universidad de Monash, Marie Segraves, que publicó un estudio en el que se investigaba la experiencia de los trabajadores ilegales en Australia, creen que el número podría ser considerablemente mayor y que podría aumentar.
"Con la actual crisis de salud pública, todo tipo de análisis e informes en el espacio de la inmigración está sugiriendo que, debido a lo lenta y parcial que ha sido la respuesta del gobierno, el grupo de personas indocumentadas en Australia y literalmente abandonadas aquí sin estatus ... va a crecer exponencialmente", dijo Verma.
"Así que 100.000 es la línea de base a partir de la cual las cosas sólo pueden expandirse".
Debido a la naturaleza precaria del trabajo ilegal, por el que los migrantes ilegales suelen estar mal pagados, remarcó, Segrave quien explicó que muchos de ellos viven en alojamientos hacinados, lo que significa que el distanciamiento social es imposible.
"La mayoría de los trabajadores con los que tuve contacto que trabajan en este tipo de condiciones con este estatus, viven con muchas otras personas, pero también tienden a desplazarse mucho porque buscan oportunidades de trabajo", dijo.
Ilegalidad en industrias esenciales
La situación se complica por el hecho de que muchas industrias que se sospecha que contratan un número importante de trabajadores ilegales son industrias esenciales.
En un informe de la Universidad de Adelaida, publicado en 2019, se constató que muchos agricultores australianos tenían que elegir entre contratar a trabajadores ilegales o dejar que sus cultivos fracasaran. "Las normas laborales deficientes y la explotación de los trabajadores se han convertido en normas establecidas en los bolsillos del mercado de la horticultura", decía el informe.
"Las granjas se han convertido en un secreto tan abierto, en realidad hace muy poco", dijo Verma, y añadió que las industrias de limpieza comercial, de entrega y de mataderos también eran puntos calientes para los trabajadores ilegales.
"Todos estos nodos de la economía que necesitan seguir moviéndose durante la pandemia se mantienen críticamente unidos por personas que no tienen un estatus formal de visado o que tienen un estatus formal que está a punto de agotarse y no tienen nada más que hacer".
También preocupa que a medida que las industrias sientan los efectos económicos de la pandemia, pasen a depender más de los trabajadores ilegales que se ven obligados a aceptar salarios más bajos y malas condiciones.
"Creo que existe la posibilidad de que ese tipo de explotación continúe y potencialmente aumente", dijo Segrave. "Y esos trabajadores se verán aún menos incentivados a buscar cualquier tipo de ayuda debido a la falta de otro trabajo disponible".
El grupo de Verma ha recaudado hasta el momento más de 41.000 dólares a través de un evento de recaudación de fondos en línea para un fondo de emergencia destinado a apoyar a los inmigrantes indocumentados que se encuentran sin ingresos durante la pandemia.
El grupo también pide que se garantice que los inmigrantes puedan acceder a la atención médica independientemente de su situación de visado.
Contacterse con Immigración
Victoria, Nueva Gales del Sur y Australia Occidental han eliminado temporalmente el pago del tratamiento con COVID-19 para los no ciudadanos que no tienen seguro de viaje, pero los defensores dicen que esto no es suficiente para combatir el temor que muchos sienten acerca de presentarse para someterse a esas pruebas.
"Incluso en Victoria, el despliegue del aumento de las pruebas requiere un cuidadoso debate y promoción en la comunidad para hacer saber a la gente que cuando eso ocurra nadie le preguntará sobre su situación de visado", dijo Segrave, "porque queremos que la gente se presente".
La semana pasada, el ministro de Inmigración en funciones, Alan Tudge, dijo a los inmigrantes temporales que se enfrentan a la expiración de su visado y sin posibilidades de retornar a sus países que se contacten con los funcionarios de inmigración.
"Si literalmente no hay vuelos y están preocupados de que su visa esté llegando a su fin", dijo, "entonces deben llamar al departamento de inmigración con urgencia".
Un portavoz del Departamento del Interior dijo: "Todas las personas en Australia, independientemente de la situación de su visado deben cumplir las directrices de salud actuales y buscar tratamiento y pruebas si se encuentran mal".
También instaron a toda persona que se encuentre en Australia de manera ilegal a que se presente y examine su situación lo antes posible.
Las personas en Australia deben permanecer por lo menos a 1,5 metros de distancia de los demás y las reuniones se limitan a dos personas, a menos que estén con su familia u hogar.
Si cree que puede haber contraído el virus, llame a su médico (no lo visite) o póngase en contacto con la línea nacional de información sanitaria sobre el virus coronario al 1800 020 080. Si tiene dificultades para respirar o está experimentando una emergencia médica, llame al 000.
SBS se compromete a informar a las diversas comunidades de Australia sobre los últimos avances de COVID-19. Las noticias e información están disponibles en 63 idiomas en sbs.com.au/coronavirus.
