Los estados de Victoria y Nueva Gales del Sur se vuelven a preparar para enfrentar los riesgos de los incendios, al mismo tiempo que se recuperan del severo impacto de las tormentas, lluvias y granizo del lunes.
Según la oficina de Meteorología, varias regiones en ambos estados experimentaran un cambio este miércoles que empujará las temperaturas a los 30 grados y traerá vientos fuertes con velocidades de hasta 50 kilómetros por hora.
Se pronostica que las temperaturas en varias partes de Sídney superarán los 40 grados el jueves; la más afectada será la localidad de Penrith con 43 grados.
Las autoridades han declarado una prohibición total de incendios en todas las áreas occidentales y centrales del estado de Victoria y en tres áreas de Nueva Gales del Sur, ya que 78 incendios continúan ardiendo en todo el estado.
El clima cálido regresará después de fuertes lluvias y granizo del tamaño de pelotas de golf que cubrieron partes de la ciudad de Melbourne, Sídney y Canberra.
"Ha sido un clima de calesita en los últimos días. Hemos pasado de incendios, tormentas e inundaciones y granizo gigante del tamaño de limas, al peligro extremo de incendios", dijo Kevin Parkyn, pronosticador principal de la Oficina de Meteorología.
El Cuerpo de Bomberos Rurales de Victoria (CFA) está preocupado por las condiciones climáticas ya que podrían iniciar nuevos incendios en el oeste y el centro de Victoria, y expandir los incendios actuales en el este del estado.
Golf-ball sized hail transforms Parliament House in Canberra Source: AAP
El impacto de las lluvias
El Servicio de Emergencia del Estado de Victoria ha recibido 2.220 llamadas de asistencia desde que las lluvias azotaron al estado el domingo por la tarde, seguido de otra tormenta el lunes.
La mayoría de las llamadas fueron generadas por daños a edificios, debido a la caída de unos 300 árboles, y otras 250 llamadas fueron por inundaciones.
Las lluvias fueron más severas en Mount Moornapa en la región de Gippsland, que recibió 139 mililitros de precipitaciones, marcando así su día más lluvioso desde 2007.
Melbourne registró 44 mililitros de precipitaciones el martes, lo que marcó su mayor registro en 24 horas desde 2011.
نیروهای دفاعی در برداشتن درختان سرنگون شده از روی جادهها همکاری کردهاند. Source: Australian Department of Defence
Aunque las lluvias más ligeras en East Gippsland y el noreste de Victoria han ayudado a los bomberos a combatir los incendios que aún permanecen activos en la región, también han causado daños en las carreteras por el deslizamiento de lodo.
Pero los equipos de rescate lograron abrir caminos para los residentes a pesar del fuego y el agua.
"Secciones de la autopista Princes Highway desde Orbost hasta Cann River y desde Mallacoota hasta la frontera con Nueva Gales del Sur se han abierto a residentes locales y personas con permisos especiales", dijo el comisionado de Manejo de Emergencias Andrew Crisp.
