Una funcionaria pública de alto rango que supervisó el plan ilegal de Robodebt ha sido forzada a dejar su puesto en el Departamento de Defensa tras las conclusiones de la comisión real.
Kathryn Campbell, que anteriormente era directora del Departamento de Servicios Humanos, ha sido "retirada involuntariamente" de su puesto de asesora en Defensa, según ha confirmado la AAP.
Fue suspendida sin goce de sueldo el 10 de julio, tres días después de que informe de la comisión real.
Campbell fue nombrada asesora de la asociación de seguridad AUKUS en junio del año pasado, con un salario de $900.000 al año.
La comisión determinó que Campbell presentó pruebas engañosas al gabinete sobre las deudas, pero guardó silencio porque el entonces ministro Scott Morrison quería recaudar las deudas porque el gobierno no podría lograr ahorros presupuestarios sin esos fondos.
Si bien la comisión dijo que "podía inducir a error porque no contenía ninguna referencia a la media de ingresos ni a la necesidad de un cambio legislativo", la Sra. Campbell afirmó que se trataba de un "descuido2.
Sin embargo, la comisión consideró que esas denuncias eran extraordinarias para una persona con su experiencia.
Primera funcionaria alta afectada
El primer ministro Anthony Albanese confirmó que la decisión de suspender a la Sra. Campbell fue tomada por el Departamento del Primer Ministro y el Gabinete y los "organismos apropiados".
Albanese dijo que la comisión real identificó deficiencias en la administración pública y que era necesario responder.
"La mayoría de las personas que analizan la tragedia humana causada por Robodebt y las conclusiones de la comisión real tienen muy, muy claro que los fracasos del gobierno de Morrison se remontan a la época en que Scott Morrison era ministro", dijo el jueves a la ABC Radio.
Albanese no dijo si la suspensión sería permanente.
Dijo que el gobierno respondería de manera apropiada a las conclusiones de la comisión real, que eran "más condenatorias de lo que todos esperaban".
La portavoz de los servicios sociales de los Verdes, Janet Rice, dijo que la suspensión de la Sra. Campbell era un paso positivo.
"Pero no debería terminar ahí: todos los responsables de este plan brutal e ilegal, incluido Scott Morrison, también deben rendir cuentas", dijo.
"El daño, el trauma y las muertes podrían haberse evitado si no fuera por las acciones inhumanas y la falta de rendición de cuentas por parte del ex primer ministro Morrison entre otros, incluidos altos funcionarios departamentales como la Sra. Campbell".
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