Los padres de un niño de cinco años que está paralizado debido a un trastorno genético raro esperan que el ministro de Inmigración intervenga para detener su deportación.
Shaffan Muhammad Ghulam nació en Perth con un trastorno que afecta el desarrollo de sus huesos y le obliga a utilizar un respirador artificial.
La solicitud de su familia para la residencia permanente fue rechazada debido al costo que supone su atención médica continuada.
Su padre, Qasim Butt, dijo a la ABC que los médicos le advirtieron de que la vida de su hijo estaría en riesgo si entraba en el ambiente de baja presión de un avión.
“Uno de los médicos me ha dicho ‘si se ve obligado a deportar a Shaffan, podría suponer la muerte’ y como padre es muy doloroso leer o escuchar estas palabras de los médicos”, dijo Qasim.
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