Victoria se ha convertido en el primer estado de Australia en introducir leyes específicas para manejar una pandemia.
El proyecto de ley de Enmienda de Salud Pública y Bienestar (Gestión de pandemias) fue aprobado el jueves por la cámara alta con 20 votos a favor y 18 en contra de la propuesta.
El parlamentario del partido Transport Matters, Rod Barton, el diputado del partido Animal Justice, Andy Meddick, la representante del partido Rasonamiento, Fiona Patten, y la líder de los Verdes Samantha Ratnam votaron a favor de la legislación.
El proyecto de ley fue aprobado en la cámara baja horas más tarde, donde el gobierno domina con una mayoría, después de que la oposición presentara, sin éxito, enmiendas adicionales.
Después de recibir la sanción real del gobernador de Victoria, las leyes entrarán en vigor a partir del 16 de diciembre, cuando caduque el estado de emergencia actual.
Según la legislación, el premier y el ministro de salud tendrán el poder de declarar una pandemia e imponer órdenes de confinamiento, uso de mascarillas, mandatos de vacunación y cuarentena.
La aplicación de las órdenes pandémicas puede variar según las características de las personas en cada grupo, por ejemplo, la edad y el estatus de vacunación de un individuo, ya estos factores determinan la amenaza de una persona para el sistema de salud pública.
Bajo el actual estado de emergencia, los poderes recaen en el director de salud, que es un funcionario no electo del gobierno.
El premier Daniel Andrews dijo que a pesar de que el estado de emergencia iba a concluir, la pandemia "no ha terminado".
"Para proteger a las personas vulnerables, para mantenernos seguros y abiertos (al mundo), tenemos que reconocer que esto no ha terminado, todavía hay cosas que debemos observar, reglas que deben permanecer", dijo.
Andrews agregó que los mandatos de vacunación "no aplicarán indefinidamente", pero señaló que pueden permanecer hasta que comience la campaña de vacunación de la dosis de refuerzo y hasta que los niños menores de 12 años reciban la aprobación para ser vacunados.
La cámara alta pasó 21 horas esta semana debatiendo varias enmiendas al proyecto de ley, elaboradas para acomodar las inquietudes del diputado Barton después de que el ex ministro de Trabajo, Adem Somyurek, anunció que se reintegraría al parlamento, después de una ausencia autoimpuesta, para votar en contra.
Somyurek estaba presente en la cámara cuando se produjo la votación final el jueves.
La legislación se convirtió en la causa de protesta de los grupos anti-confinamiento y anti-vacunación, que estuvieron ocupando los escalones del parlamento estatal durante semanas.
El líder de la oposición, Matthew Guy, dijo que estaba decepcionado con la aprobación del proyecto de ley y reafirmó su compromiso de eliminarlo si gana las próximas elecciones en 2022.
"(Es) una mala política, malas leyes, que se pasan por el parlamento sin consulta, o con una consulta muy limitada, y que irán en detrimento del habitante promedio de Victoria", dijo.
El jueves marcó la última semana de sesiones para la cámara baja este año.
La cámara alta regresará al Parlamento de Victoria el viernes para aprobar proyectos de ley que permitirán implementar las recomendaciones de las comisiones reales entorno al caso de Crown Casino y el escándalo del Abogado X, y aprobar legislaciones para establecer un organismo que supervise el sector de reciclaje del estado y un nuevo sistema de cuatro contenedores.
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