Sinopsis:
Cuba legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo, la adopción por parte de este tipo de parejas y el vientre de reemplazo sin compensación económica, después de que los cubanos votaran a favor de un código de las familias que aumenta la protección de las minorías.
Durante décadas, las personas LGBTQI+ de Cuba se enfrentaron a la discriminación oficial en la isla, gobernada por los comunistas.
A principios de la década de 1960, tras la llegada al poder de Fidel Castro, muchos homosexuales fueron enviados a campos de trabajo del gobierno junto con los opositores políticos.
Ahora, según el Consejo Electoral Nacional de Cuba, los resultados del referendo nacional del domingo indican que acudió a votar el 74 por ciento de los ocho millones de cubanos con derecho a voto.
Casi 4 millones votaron a favor y casi 2 millones en contra, lo que supone un apoyo abrumador al nuevo Código de las Familias que amplía la protección de las mujeres, los niños y los adultos mayores, y permite a las parejas LGBTQI+ casarse y adoptar niños.
En julio pasado, la Asamblea Nacional de Cuba aprobó el Código de las Familias, un paquete legislativo que fue sometido a referéndum el domingo y que, entre otras cosas, abre la puerta al matrimonio igualitario en la isla, protecciones para los niños, los adultos mayores, los padres sustitutos y los derechos de las mujeres.
Luego de darse a conocer los resultados, parejas del mismo sexo celebraron el resultado y anunciaron en las redes sociales que muy pronto contraerían matrimonio.
Tras el referendo, Cuba se convirtió en el noveno país de América Latina en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, detrás de Argentina, Chile, Uruguay, Brasil, Colombia, Ecuador, Costa Rica y México.
Escucha el informe completo en el podcast situado en la parte superior de la página.
