Puntos destacados:
- El papa Francisco disolvió el Sodalicio de Vida Cristiana (SCV), una congregación ultraconservadora de laicos y sacerdotes de origen peruano implicada en agresiones sexuales a menores.
- El grupo religioso se extiende a países como Argentina, Brasil, Chile, Colombia o Estados Unidos.
- En 2018, Francisco ordenó intervenir el SCV, tras una serie de denuncias sobre abusos sexuales cometidos por cuatro líderes de la organización durante casi tres décadas.
El Papa Francisco disolvió el Sodalicio de Vida Cristiana, una congregación católica ultraconservadora de origen peruana, tras numerosas denuncias de abusos sexuales, psicológicos y de poder por parte de su fundador, el laico peruano Luis Fernando Figari y otros cabecillas.
El grupo religioso está reunido en Aparecida, Brasil. Mediante un comunicado confirmó su disolución por orden del papa Francisco, aunque señaló que esa información aún tiene "absolutamente carácter reservado".
Esta congregación fundada en Perú en 1971 se dedicaba a evangelizar a jóvenes y pobres bajo los compromisos de obediencia y celibato apostólico. El escándalo se volvió público tras la publicación del libro Mitad Monjes, Mitad Soldados, que reúne los testimonios de 30 víctimas.
En 2018, el papa Francisco elimina el secreto pontificio en casos de abusos sexuales por parte de miembros del clero; las autoridades podrán pedir a instituciones religiosas información de los casos.
La congregación reconoció que Figari y otros miembros de la cúpula abusaron sexualmente de 19 menores y 10 mayores entre 1975 y 2002. Estos abusadores utilizaban su posición de poder para cometer abusos sexuales, psicológicos y físicos, y mantenían un control coercitivo sobre las víctimas.
Martín López de Romaña, cuenta en el libro 'La jaula invisible' cómo fue su experiencia como exmiembro del Sodalicio de Vida Cristiana.
El Sodalicio de Vida Cristiana tenía presencia en varios países de América Latina, Estados Unidos e Italia, incluyendo Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador y Perú. La organización se extendió a través de comunidades y parroquias en estas regiones, donde se cometieron muchos de los abusos denunciados.
La periodista chilena, Camila Bustamante Soto, aborda en su libro "Siervas" los abusos cometidos por el ala femenina del Sodalicio.
Luis Fernando Figari fue expulsado del Sodalicio en agosto de 2024 después de que se comprobara que cometió abusos sexuales y de poder. El Vaticano ya lo había sancionado en 2017 y prohibido tener contacto con cualquier miembro de esta congregación. En octubre de 2016, el acusado Luis Fernando Figari se declaró inocente en Roma.
En 2023, el Papa Francisco envió al arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y al sacerdote español Jordi Bertomeu para investigar los numerosos abusos cometidos en el seno del Sodalicio. En 2024, la Santa Sede expulsó a Figari y a otros 15 miembros de la organización.
Pero, el sacerdote de esta congregación, Jaime Berthel, dijo a periodistas que eran especulaciones y que acatarían la resolución del Vaticano.
Tras la decisión de la Iglesia católica de suprimir a la orden Sodalicio de Vida Cristiana, queda pendiente el rol del Estado peruano para que los responsables de las graves acusaciones sean llevados ante la justicia y se pueda reparar a las víctimas y sobrevivientes.