Glas, de 48 años, pasó a ser el funcionario en activo de mayor rango en América Latina en ser sancionado por la trama de coimas de Odebrecht, que golpeó los círculos del poder y la política al salpicar a exmandatarios y mandatarios latinoamericanos.
Glas, con sentencia en primera instancia, fue juzgado como autor de asociación ilícita al igual que otras cuatro personas, incluido su tío Ricardo Rivera, quien hizo de enlace para que el funcionario recibiera coimas por 13,5 millones de dólares.
Sobre el impacto de esta condena , la opinión del analista político de la FLACSO en Ecuador, Santiago Basabe.