por Laura BONILLA
El mexicano Joaquín "Chapo" Guzmán, uno de los narcotraficantes más célebres del mundo, fue condenado este miércoles por un juez de Nueva York a pasar el resto de sus días en una cárcel de Estados Unidos.
Brian Cogan, el juez federal de Brooklyn que presidió su caso, recordó su "crueldad abrumadora" en una audiencia que duró menos de una hora, y dijo que debía sentenciarlo por ley a prisión de por vida más 30 años adicionales, como solicitaba el gobierno estadounidense.
El capo de 62 años, vestido con un traje gris y por primera vez luciendo un espeso mostacho en la corte, escuchó serio la sentencia y se quejó de que el juez se negó a realizar un nuevo juicio.
La defensa solicitaba un nuevo proceso porque un jurado anónimo contó a Vice News que accedió a las redes sociales y medios de prensa durante el proceso, al igual que varios otros jurados, algo prohibido y que puede haber influido en el veredicto.
- "Aquí no hubo justicia" -
"Ya que el gobierno de Estados Unidos va a enviarme a una prisión donde nunca más van a escuchar mi nombre, aprovecho para decirles: aquí no hubo justicia", dijo en español el Chapo al juez Cogan.
Fue la primera vez que habló en público desde que fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, y no pidió disculpas por sus crímenes.
"Estados Unidos no es mejor que cualquier otro país corrupto que ustedes no respetan", afirmó.
El Chapo fue acusado de traficar o intentar traficar 1.213 toneladas de drogas a este país durante un cuarto de siglo, así como 1,44 toneladas de base de cocaína, 222 kg de heroína, casi 50 toneladas de marihuana y "cantidades" de metanfetaminas.
Durante el juicio, la acusación presentó pruebas de que el Chapo ordenó la muerte o torturó y mató él mismo a por lo menos 26 personas o grupos de personas, incluidos supuestos informantes, narcos rivales, policías, socios y hasta familiares.
Luego de un rocambolesco juicio de tres meses, lleno de momentos escabrosos y surrealistas, el 12 de febrero un jurado le declaró culpable de 10 delitos de narcotráfico, lavado de dinero y posesión de armas de fuego.
El gobierno estadounidense celebró la sentencia de quien considera el mayor narcotraficante del planeta desde la muerte del colombiano Pablo Escobar.
"Nos aseguraremos de que pase cada minuto de cada día del resto de su vida en prisión aquí, en Estados Unidos", dijo a periodistas el fiscal federal de Brooklyn, Richard Donoghue.
"Hoy se hace justicia para el pueblo estadounidense. Se hace justicia para México, cuyas instituciones fueron corrompidas durante décadas por Guzmán y el cartel de Sinaloa", señaló por su lado Brian Benczkowski, fiscal general adjunto de la división criminal del departamento de Justicia.
El Chapo también se quejó ante el juez de sus condiciones de reclusión en la cárcel de Manhattan donde ha estado detenido en aislamiento casi total desde hace 30 meses.
Lamentó la falta de luz natural, de aire fresco, el fuerte ruido de los ductos de ventilación, que no lo dejan abrazar a sus pequeñas hijas mellizas -que no acudieron a la sentencia- y recordó que su esposa Emma Coronel, una exreina de belleza de 30 años, no ha podido nunca visitarlo ni tocarlo.
"Ha sido una tortura las 24 horas, emocional, psicológica, mental", dijo. "Es de lo más inhumano que he pasado en mi vida".
Cuando entró y salió de la sala, el Chapo lanzó besos a Coronel y se tocó el corazón, y ella, vestida con un traje blanco y negro, hizo lo mismo.
- "Un millón de dólares" -
Durante la sentencia, Andrea Fernández Velez, una colombiana que el Chapo intentó una vez matar y que cooperó con el gobierno y tiene ahora una nueva identidad secreta en Estados Unidos contó su historia.
Velez, exasistente del narco colombiano y socio del Chapo Alex Cifuentes, tenía una agencia de modelos en Ciudad de México, una empresa fachada que en realidad ofrecía prostitutas a funcionarios mexicanos, todo pagado por el Chapo.
El Chapo "ofreció un millón de dólares a los Hells Angels (una pandilla de motociclistas) para acabar con mi vida", relató llorando y mirando al capo, pero éste solo tenía ojos para Coronel.
"Eso me causó un daño psicológico, afortunadamente me enteré y escapé con la ayuda del FBI", contó Velez.
En el juicio, Cifuentes contó que a pedido del Chapo, Velez ofreció a un general mexicano no identificado 10 millones de dólares para que dejara de perseguir al capo. Pero el militar rechazó la oferta, y el Chapo, furioso, decidió matarla cuando ésta estaba en Canadá.
El juicio fue un fascinante viaje a uno de los mayores y más despiadados carteles de la droga.
La fiscalía presentó abrumadoras pruebas de la culpabilidad del acusado y convocó al proceso a 56 testigos, incluidos 14 exsocios, amigos y hasta una amante del Chapo que se escapó con él desnudo corriendo por un túnel.
El gobierno estadounidense busca requisarle más de 12.600 millones de dólares, la suma que habría amasado. Pero hasta ahora no ha podido incautar al Chapo ni un centavo.
El Chapo, protagonista de dos espectaculares fugas de prisión de cárceles mexicanas, probablemente cumplirá su sentencia en la cárcel de Colorado ADX Florence, conocida como la "Alcatraz de las Montañas Rocosas" y considerada la más segura de Estados Unidos.
Sinaloa recibe sin ilusiones de cambios la condena del mexicano "Chapo" Guzmán
Un aire de sarcasmo recorre Sinaloa, cuna del legendario capo mexicano, Joaquín "El Chapo" Guzmán, ante la sentencia de cadena perpetua que recibió este miércoles en Estados Unidos. En esta árida región aseguran con sonrisa de resignación que ni la violencia ni el tráfico de drogas disminuirán.
En el imaginario popular de Sinaloa, un cártel que surgió en la década de 1980 y que lleva el nombre de ese estado del noroeste mexicano, todavía gravita la figura de "El Chapo" y su exsocio Ismael "El Mayo" Zambada, aún prófugo.
Pese a los escalofriantes testimonios expuestos durante el histórico juicio y la sentencia de por vida más 30 años adicionales impuesta este miércoles por un juez en Nueva York, algunos en Sinaloa siguen creyendo que "El Chapo" hizo construir escuelas, iglesias, caminos y que en suma fue un benefactor. Incluso le restan responsabilidad en asesinatos y secuestros.
"Yo pienso que no (fue justo). También fue una buena persona, que ayudó a personas necesitadas", dijo a la AFP Lupita Ramos, una ama de casa de 46 años, tras conocer la noticia. La mujer habla frente al altar del mítico Jesús Malverde, conocido coloquialmente como "El Santo de los Narcos", un lugar saturado de fotografías y notas de agradecimientos, en el centro de la capital estatal, Culiacán.
Al lado de un busto de Malverde, quien según la leyenda era un bandido que robaba a los ricos para dar a los pobres al estilo de Robin Hood, una mujer limpiaba el martes una estatuilla de yeso de Guzmán: la cara en alto, un rifle AK47 en rieste, vestido con camisa rosa y pantalones azules.
Para el ferrocarrilero Juan Antonio Orozco, de 39 años, el tráfico de drogas no va a terminar con el perpetuo encarcelamiento de Guzmán. "Veo difícil que se termine... cae uno y sale otro, son cosas de nunca acabar", dice mientras aguarda afuera de la capilla.
"Se veía”, que esa sería la sentencia, “por todo el tráfico que ha habido, y las muertes y todo eso y era de esperarse que Estados Unidos” quería ese fallo, dice cabizbajo, pero luego levanta un poco la voz para decir que en Culiacán “lo respetan porque ayuda a la gente".
- Tumbas con aire acondicionado -
Pero a pesar de las supuestas obras públicas en Sinaloa impulsadas por el capo, quien según la justicia estadounidense debería tener por lo menos unos 12.000 millones de dólares en sus arcas, la brecha de desigualdad es impactante.
Cerca de caseríos hechos con tablas de madera, se encuentra el cementerio Jardines de Humaya donde muchos narcotraficantes están enterrados. Es famoso por sus mausoleos extravagantes que llegan a tener hasta tres pisos, aire acondicionado y hasta puertas de vidrio blindado.
Ahí una fachada de piedra beige decora el sepulcro de Ernesto Guzmán, uno de los hermanos de "El Chapo", cuyo interior está repleto de globos y flores. Dos pequeños autos de piedra adornan las esquinas de las cornisas.
Según Miguel Ángel Vega, periodista del diario semanal local Ríodoce, con la captura y extradición del narcotraficante que protagonizó dos espectaculares fugas de cárceles mexicanas, la violencia y el tráfico de drogas "no se acabó" y su muy probable sentencia de cadena perpetua no cambiará eso.
Dos cadáveres con el tiro de gracia aparecieron este miércoles al lado del Río Culiacán, muy cerca de una avenida rápida de esta ciudad de cerca de 700.000 habitantes.
- Hay "20 Chapos" -
"El cartel de Sinaloa no es 'El Chapo', el cartel de Sinaloa no es 'El Mayo', el cartel de Sinaloa es un grupo de por lo menos 20 líderes", asesta Vega, experto en narcotráfico.
"En Culiacán existen 20 Chapos, y hay uno que está allá [preso en Estados Unidos], pero es como la cereza en el pastel, como el que está allá es el que se infló o el que se dijo en los medios de comunicación que es el responsable de todo esto, que es el responsable de que los jóvenes en Estados Unidos consuman drogas", su proceso ha sido el más explotado mediáticamente, dice.
Joaquín "El Chapo" Guzmán se forjó una leyenda alimentada por "narcocorridos" que relatan sus hazañas, y riquezas reseñadas en la revista Forbes, que en 2011 lo incluyó en su lista de las mayores fortunas del mundo, con más de 11.000 millones de dólares.
Dos años después, la Comisión Anticrimen de Chicago lo nombró enemigo público número uno de la ciudad y lo comparó con Al Capone, mientras que se convirtió en el narcotraficante más buscado por la DEA.
Y el mito sigue creciendo. En la víspera de la audiencia de sentencia, al lado de la catedral, un hombre que calzaba unos huaraches (sandalias) con pies callosos y quemados por el sol, aseguró que el hombre que fue extraditado en enero de 2017 a Estados Unidos no es "El Chapo".