El caso fue escuchado el domingo por el Tribunal Superior en pleno, conformado por tres jueces de la Corte Federal que incluía al presidente del Tribunal Superior James Allsop, al juez Anthony Besanko y al juez David O'Callaghan.
El presidente del Tribunal Superior, Allsop, dijo que los tres jueces habían decidido por unanimidad mantener la cancelación de la visa de Djokovic por parte del gobierno.
Allsop dijo que no era “parte de la función de la corte” decidir sobre “los méritos o la sabiduría” de la decisión del ministro de cancelar la visa de Djokovic.
Dijo que el tribunal “no estaba en condiciones de entregar razones hoy”, pero que se publicarán los detalles del fallo “en una fecha posterior”.
El tribunal también ordenó que Djokovic pague los costos legales del gobierno por la audiencia.
La decisión significa que es probable que Djokovic, que no está vacunado contra el COVID-19, permanezca detenido por inmigración en Melbourne hasta que sea deportado.
Estos son los principales episodios de la polémica sobre Novak Djokovic, el número uno del tenis que quería participar en el Abierto de Australia (17-30 enero) sin estar vacunado, cuyo visado de ingreso a ese país fue anulado nuevamente, y que regreso al centro de retención este sábado:
16 de diciembre:
Dos días después de haber asistido a un partido de básquet en Belgrado, en el que varias personas dieron luego positivo al COVID-19, Djokovic se realiza un test de antígenos con resultado negativo y luego una PCR, que un día después mostró un resultado positivo.
Antes de haber obtenido el resultado, el tenista asiste a la presentación de un sello con su imagen en Serbia.
17 de diciembre:
El jugador de Belgrado, de 34 años, participa en un acto con jóvenes tenistas. Novak Djokovic segura que efectuó antes del mismo un segundo test de antígenos, que dio negativo. "No tenía síntomas, me sentía bien y no había recibido la notificiación del PCR positivo antes del fin de ese evento", aseguró en un comunicado publicado en Instagram el 12 de enero.
18 de diciembre:
Igualmente en Belgrado, concede una entrevista y una sesión de fotos al diario deportivo francés L'Équipe, con motivo de la concesión del trofeo "Campeón de los Campeones". Sabía ya entonces que era positivo al COVID-19.
"Me sentí obligado (...) ya que no quería fallar al periodista, pero cuidé la distancia social y el uso de la mascarilla, salvo en la fotografía", dijo el tenista.
"Regresé a mi casa después de la entrevista para aislarme durante el tiempo requerido. Reflexionando luego, fue un error de juicio y admito que tendría que haber aplazado ese compromiso", afirmó.
25 de diciembre:
Djokovic es fotografiado en Belgrado en compañía del jugador serbio de balonmano Peter Djordjic.
31 de diciembre:
La Academia SotoTennis tuitea un vídeo de Djokovic entrenándose en Marbella (España). El 2 de enero, la prensa local le fotografía entrenándose, también en Marbella.
4 de enero:
Djokovic anuncia que viaja a Australia para defender su título gracias a una "exención médica" que le permitirá jugar el torneo, aunque sin precisar en qué consistía.
Todos los tenistas que participen en el Abierto de Australia deben estar vacunados contra el COVID-19 u obtener una exención médica, otorgada por una comisión de expertos independientes.
5 de enero:
El responsable del tenis australiano, Craig Tiley, anuncia que 26 jugadores o técnicos, de un total de 3.000 que participarán en la prueba, solicitaron una exención médica, pero que solo unos pocos la habían conseguido.
"No ha existido trato de favor. No se ha concedido un permiso especial a Novak", se defendió Tiley ante las críticas.
6 de enero:
Las autoridades australianas anuncian, tras la llegada de Djokovic al aeropuerto de Melbourne, que han cancelado el visado que debía permitir al tenista la entrada al país.
Djokovic fue trasladado a un centro de detención de migrantes, al tiempo que sus abogados apelaban esta decisión.
8 de enero:
Djokovic habría recibido la exención médica después de haber dado positivo al COVID-19 el 16 de diciembre, informaron sus abogados en el documento de apelación, de 32 páginas.
Sus abogados también denunciaron que el tenista estuvo retenido en el aeropuerto de Melbourne durante ocho horas, la mayoría de ellas incomunicado.
10 de enero:
Un juez australiano ordena la liberación inmediata de Djokovic. En su opinión, si las autoridades le hubieran dado tiempo "hubiera podido consultar a otras personas y presentar argumentos para explicar por qué su visa no debería ser cancelada".
El gobierno australiano concede que la manera en la que se realizó la entrevista no fue "razonable". Un abogado del gobierno advierte sin embargo que el ejecutivo puede todavía decidir una expulsión, lo que tendría como consecuencia el veto a su entrada en territorio australiano durante tres años.
11 de enero:
El jugador retoma el entrenamiento.
Parece que en el documento entregado a su llegada a Melbourne no señaló que había estado en España dentro de los 14 días previos a su viaje, algo que podría conllevar su expulsión.
12 de enero:
Djokovic denuncia en un comunicado en Instagram la "desinformación" sobre sus apariciones en público tras su test positivo el 16 de diciembre y aporta su cronología de los hechos.
En lo referente a no haber señalado su presencia en España dentro de los 14 días precedentes al viaje, Djokovic reconoce "un error humano" que "no fue deliberado" por parte de su "agente".
13 de enero:
El sorteo del Abierto de Australia designa al serbio Miomir Kecmanovic (78º de la clasificación mundial) como adversario de Djokovic en primera vuelta.
14 de enero:
El gobierno australiano anula nuevamente el visado de Djokovic, en una decisión adoptada por motivos de "salud y orden público", según explicó el ministro de Inmigración, Alex Hawke, en un comunicado.
Djokovic presenta un nuevo recurso para tratar de estar en el Abierto de Australia.
15 de enero:
El tenista serbio regresa al centro de detención a la espera de una decisión definitiva por parte de la justicia sobre su recurso para que su expulsión sea bloqueada.
16 de enero:
Después de una audiencia que duró horas y en la que deliberaron tres jueces, Djokovic pierde su demanda y será deportado de Australia, no podrá competir en el Abierto de Australia y podría enfrentarse a una prohibición de entrada a Australia de hasta tres años.