Analysis

El impuesto a los ahorros para la jubilación que pasó desapercibido durante la campaña electoral

Los nuevos impuestos a los ahorros para el retiro no recibieron mucha atención durante la campaña electoral. Sin embargo, su implementación podría ser complicada.

A woman sitting at a table holding papers. A laptop and calculator are also in front of her.

El cambio fiscal propuesto pretende mejorar la equidad y la sostenibilidad del sistema australiano de ahorros para el retiro, pero no está claro cómo funcionará en la práctica. Source: Getty / Johner Images

PUNTOS DESTACADOS:
  • Actualmente existen dos tipos de impuestos —y concesiones fiscales— para los fondos privados para la jubilación.
  • A partir del 1 de julio, el gobierno propone aumentar el impuesto concesional sobre las ganancias de las cuentas "super" en la fase de acumulación.
  • El costo de las actuales concesiones para superannuation para el presupuesto federal es de aproximadamente $50 mil millones en ingresos no percibidos.
  • La Asociación de Fondos de Jubilación de Australia calcula que, para disfrutar de una jubilación cómoda, una pareja necesita un saldo en su superannuation de aproximadamente $700,000 si se jubila a los 67 años.
La reelección del gobierno de Albanese ha renovado la preocupación por los cambios planificados relacionados con los impuestos a los rendimientos de las inversiones en los fondos de jubilación.

La contundente victoria del Partido Laborista el sábado por la noche, que incluye lo que parece una mayor presencia en el Senado, sugiere que es probable que la legislación se convierta en ley próximamente.

Ingresos de jubilación en Australia

El sistema australiano de ingresos de jubilación consta de dos pilares: una pensión para la vejez financiada por el gobierno y un fondo privado para la jubilación, conocido como “superannuation”, o simplemente “super”.

El super, o fondo privado para la jubilación, incluye contribuciones obligatorias financiadas por el empleador, así como contribuciones personales adicionales.

Estos dos pilares son complementarios; es decir, una persona puede recibir una pensión aunque tenga un fondo privado de ahorros. Sin embargo, entre más fondos tenga en su super, menos pensión podrá recibir.
Aproximadamente el 70 por ciento de los activos de los fondos superannuations se mantienen en fondos regulados por la Autoridad Australiana de Regulación Prudencial (APRA, siglas en inglés), y el 25 por ciento están en fondos de jubilación autogestionados (SMSF, siglas en inglés).

Actualmente existen dos tipos de impuestos —y concesiones fiscales— para los fondos privados para la jubilación. En primer lugar, las contribuciones al fondo superannuation, tanto del empleador como las personales limitadas, están gravadas con una tasa concesional del 15 por ciento. En segundo lugar, los ingresos obtenidos a través de un fondo super están gravados con un 15 por ciento para los saldos en la fase de acumulación (cuando se realizan las contribuciones). Los ingresos obtenidos en la fase de pensión están exentos de impuestos.

Entonces, ¿qué implica la reforma propuesta?

A partir del 1 de julio, el gobierno propone aumentar el impuesto concesional sobre las ganancias de las cuentas super en la fase de acumulación del 15 al 30 por ciento para saldos superiores a 3 millones de dólares.

Los afectados —unos 80.000 titulares de cuentas privadas de jubilación, es decir el 0,5 por ciento del total— seguirán beneficiándose del tipo impositivo preferencial vigente del 15 por ciento sobre las ganancias de los primeros 3 millones de dólares de su saldo de jubilación.

También podrán transferir cualquier pérdida a ejercicios futuros como compensación de sus obligaciones tributarias.

Preocupaciones respecto a la reforma propuesta

Se ha expresado preocupación de que la reforma implique la tributación de las plusvalías latentes sobre los activos mantenidos en cuentas privadas de jubilación, como acciones o propiedades, incluso si no se han vendido.

Esto supone, sin duda, una desviación significativa del statu quo. Actualmente, tanto los fondos regulados por la APRA como los SMSF solo están obligados a pagar el impuesto sobre las ganancias de capital una vez que el activo se vende y la ganancia se materializa.

Es probable que la decisión de gravar las ganancias de capital latentes resulte especialmente onerosa para los SMSF. El fondo privado de jubilación típico del sector cuenta con una cartera diversificada de activos con liquidez variable, incluyendo importantes tenencias de efectivo. Sin embargo, las carteras de los SMSF suelen estar dominadas por un activo grande e ilíquido (que no se puede vender ni convertir fácilmente en efectivo), como una finca o un negocio.
En consecuencia, un SMSF que se enfrenta a una gran ganancia de capital no realizada, por ejemplo, derivada de un aumento en el valor de la propiedad, podría no tener suficiente flujo de caja para pagar la factura fiscal asociada. El administrador fiduciario del SMSF podría verse obligado a vender activos de forma prematura para cumplir con la obligación tributaria del fondo.

En Estados Unidos, el presupuesto para 2025 del expresidente Joe Biden incluyó una propuesta similar para gravar las ganancias de capital no realizadas de los hogares con un patrimonio superior a 100 millones de dólares estadounidenses (155,9 millones de dólares australianos).

El objetivo de la reforma propuesta

Al anunciar esta iniciativa, el tesorero Jim Chalmers sugirió que la motivación era doble.

En primer lugar, el gobierno federal se enfrenta a presiones sobre los resultados del presupuesto y las generosas concesiones fiscales para los fondos privados de jubilación se están volviendo cada vez más caras.

En segundo lugar, las concesiones fiscales actuales para los fondos privados de jubilación son altamente regresivas. Esto significa que la mayoría de los beneficios de las concesiones van a parar a los hogares más ricos que, en cualquier caso, no tendrán derecho a la pensión.

El costo de las actuales concesiones para superannuation para el presupuesto federal es de aproximadamente $50 mil millones en ingresos no percibidos, según el Tesoro. Esto equivale casi al costo total de la pensión de vejez.

El Instituto Grattan argumenta que los fondos de superannuation se han convertido en un "plan de herencia financiado por los contribuyentes". Una revisión del departamento del Tesoro reveló que la mayoría de los australianos fallecen con grandes saldos pendientes en sus superannuations.

El Estándar de Jubilación de la Asociación de Fondos de Jubilación de Australia calcula que, para disfrutar de una jubilación cómoda, una pareja necesita un saldo en su superannuation de aproximadamente $700,000 si se jubila a los 67 años. El límite de $3 millones es excesivo. Sin embargo, si el límite no se indexa, más personas se verán afectadas con el tiempo.

Entonces, ¿es útil esta reforma?

Según la Revisión de Ingresos de Jubilación del gobierno, el objetivo del sistema de pensiones australiano debería ser "ofrecer un nivel de vida adecuado durante la jubilación de forma equitativa, sostenible y cohesionada".

Si bien la reforma fiscal propuesta busca mejorar la equidad y la sostenibilidad del sistema de pensiones australiano, no está claro cómo funcionará en la práctica.

En respuesta a la preocupación de los fondos SMSF sobre la dificultad para pagar las facturas de impuestos, la propuesta del gobierno es otorgar a los contribuyentes 84 días para pagar la deuda tributaria en lugar de los 21 días habituales. Esto apenas si mitiga el riesgo de que los fideicomisarios de los SMSF tengan que liquidar el principal activo de su fondo.
La propuesta de Biden presentó un modelo alternativo que permitía pagar la obligación tributaria durante varios años, no en un solo pago. Alternativamente, los contribuyentes podrían pagar un cargo similar al de un interés mientras aplazan su obligación tributaria por ganancias de capital no realizadas.

Estas alternativas no parecen haberse considerado seriamente en la propuesta del gobierno australiano.

Sin embargo, en última instancia, cabe preguntarse: ¿es realmente gravar las volátiles ganancias de capital no realizadas la forma más eficaz de mejorar la equidad y la sostenibilidad del sistema de jubilación?

Mark Melatos es profesor asociado de Economía en la Universidad de Sídney.

Melatos no trabaja, asesora, posee acciones ni recibe financiación de ninguna empresa u organización que pueda beneficiarse de este artículo, y no ha declarado ninguna afiliación relevante más allá de su nombramiento académico.

Share

Published

Source: The Conversation


Share this with family and friends